Extraño tu cara, tus ojos, la mirada que me mantenía vivo,
el dolor de tenerte en mis brazos, amaneceres interminables,
lágrimas idiotas, recuerdos, torturas dulces torturas,
quisiera ser mejor, quisiera tener una mejor alma,
estar a la altura, no odiar, ser limpio, digno.
Ojalá estuviera muerto y fuera solo gusanos y carne.
Ojalá la tierra que piso me recibiera y fuera abono, así sería útil.
Ojalá este vacío de no tenerte se terminara, así descansaría en paz.
Todas las nubes que contemplé, los sueños vanos de un muerto,
historias imaginadas con canciones inspiradoras y finales felices,
donde íbamos a estar juntos, para siempre,
donde seríamos felices, donde las promesas no son vanas,
los cielos infinitos, la gloria estar en tus manos,
de entregarme a tus caprichos por siempre,
de ser feliz porque me miras, y si brilla el sol,
lo hace para nosotros, y si llueve también llueve para los dos,
porque existir y saborear la existencia, es mirar en tus ojos,
es mi nombre en tus labios, existo porque me nombras,
porque me llamas,
muero con gusto.